| Descripción |
"Arules (modelo social, 49)" es una escultura que consta de un conjunto de espejos que se disponen en cuadrícula sobre el suelo o peana, sobre los que se colocan reglas, escuadras, plantillas, modelos de medida y patrón tomados de distintos contextos, modeladas en diferentes formas y tintadas en diversos colores.
Cada una de los cientos de post-reglas se tensionan de una manera singular, por lo que se anuncia la paradoja de la anormatividad: en el límite de la versatilidad y ductibilidad de la Ley, la diversificación y la flexibilidad normativa tiende a una situación límite en la que cada sujeto y cada ocasión exigen una norma diferente. De ese modo queda destituido el principio simbólico de la Ley. Y queda sustituido por la normativa que ya no necesita estar afectada por un principio de legitimidad, sino que es performativa para un cumplimiento, para una aplicación incuestionada. La norma no implica un principio vincular de regulación (simbólico), sino una adecuación al hecho (metonimia como desplazamiento de lo real a lo imaginario). La reivindicación de lo singular, convertido en un principio normativo, tiende a la implantación de un sistema anormativo, en el que el principio del sufragio universal, una persona, un voto, se transforma en un principio de narcisismo universal "una persona, una norma". Es la extrema rigidez de la flexibilidad.
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